lunes, 16 de mayo de 2011

¿Existe la suerte?

suerte 
  Causa que supuestamente hace que ocurra una cosa no condicionada por la relación de causa y efecto ni por la intervención humana o divina: si acerté la respuesta fue solamente por suerte. azar, fortuna.
  Sucesos o circunstancias, sean positivas o negativas, que no han sido intencionadas o previstas sino que se atribuyen a la acción del azar o la casualidad: tuve la mala suerte de tropezar con el único obstáculo que había. fortuna.
  Estos sucesos o circunstancias cuando son positivos o favorables: te deseo suerte para tu oposición.
  Condiciones de vida de una persona o grupo de personas.
  Hecho o tiempo futuro en el que una persona cree que va a vivir: la bruja echaba las cartas para adivinar la suerte. porvenir.
  Género, clase o especie de una cosa: había catado toda suerte de vinos.
  Parte de una corrida de toros. tercio.
  Modo de hacer una cosa.

suerte
 Encadenamiento de los sucesos, considerado fortuito o casual.
Circunstancia de ser, por mera casualidad, favorable o adverso lo que sucede.
Suerte favorable.
Aquello que ocurre o puede ocurrir para bien o para mal de personas o cosas.
Cualquiera de ciertos medios casuales empleados para adivinar lo por venir.
Casualidad a que se fía la resolución de una cosa.
Estado, condición.
TODO EL MUNDO QUIERE TENER SUERTE EN LA VIDA. PERO ¿QUÉ HACE QUE ALGUNOS DE NOSOTROS TENGAMOS MÁS ÉXITO QUE OTROS? ¿TIENE QUE VER REALMENTE CON NUESTRAS CAPACIDADES Y ESTRATEGIAS, O CON ALGO MUCHO MÁS IMPREDECIBLE?
¿Puede influir "algo" en cada uno de nosotros que nos haga ser más o menos afortunados en la vida?¿Por que hay personas a quienes da la sensación de que todo les sale mal y otras todo bien?

Una de mis frases preferidas siempre ha sido
"La suerte no existe es solo casualidad o experiencia". Si quieres tener mas suerte en alguna actividad solo practica mas, si quieres ganar en los juegos de azar solo juega mas. Aunque he de confesar que hay casos que me han contado que realmente parecen imposibilidades estadisticas, uno en un millon.... solo se optimista y ya.
LA SUERTE NO EXISTE,LO QUE EXISTE SON MARGENES DE POSIBILIDADES DE QUE OCURRAN LOS EVENTOS DETERMINADOS EN CAUSA Y EFECTO,ES DECIR SI COMPRAS UN BILLETE DE LOTERIA Y GANAS NO ES SUERTE TENIAS UNA POSIBILIDAD DE GANAR Y GANASTE,SI TE DEJO EL BUS NO ES MALA SUERTE LLEGASTE TARDE FUE UNA POSIBILIDAD QUE OCURRIO., QUIZA PROVOCADA.
A los que todo les salen bien es porque tienen un " destino "
( Karma) algo mejor ( El Kybalion ). 
Eric Berne escribió un libro sobre las múltples causas que llevan a una persona a tener éxito en la vida , o a tener muchos problemas ( titulo del libro : " ¿ Qué dice Usted después de decir <<HOLA>> ? ". Creo que nadie antes del Dr. Berne ha explicado de forma tan brillante el como una persona DECIDE
tener o no " suerte" en la vida.
Todo cuanto sucede en la vida ya estaba " progamado " por uno mismo, desde el útero de la madre.Parece raro pero los estudios mas recientes confirman que es asi ( ver libro 
" aprende a vivir " de Juan Antonio Ibarra Irriguibel ).

Sobre causa y efecto hay ya mucho escrito aunque creo que el libro que aconsejo es un buen inicio para comprender lo que manifiesto.

Si te encuentras una moneda por la calle no es que sea cuestion de "suerte" es mas bien de causa. Alguien la perdió.
Condición para perderla y encontrarla: Estar vivo en el momento que se pierde,haberla poseido antes, haber pasado por el lugar donde la encontrastes , haber pasado por alli antes que otro etc. etc.


Todos hemos crecido escuchando frases del tipo: "Qué suerte que tiene fulanito", "Qué mala suerte los que se encontraban en Indonesia cuando ocurrió el maremoto", "Qué horror la gente que estaba en no sé donde cuando estallo el volcán", "Qué mala suerte tuvieron los que fueron fulminados por los rayos de aquella tormenta",...
¿Suerte?
 Cuando empezamos a entender y a aceptar mejor el funcionamiento del Universo, nos podemos dar más cuenta de que nada de lo que sucede es cuestión de suerte o mala suerte.
El Universo manifiesta naturalmente y perfectamente nuestra realidad cotidiana creando las situaciones que verifican nuestras creencias.
De este modo si yo pienso repetidamente algo, por ejemplo que la gente de un sitio determinado es muy desagradable, cuando me tope con alguien de ese lugar el Universo me enviará precisamente esas personas desagradables que confirmen mi creencia y esté en la misma frecuencia vibratoria que yo.

La Ley de la Atracción es uno motor universal. El Universo como un espejo vivo, refleja materialmente lo que pedimos, aunque no nos demos cuenta de que lo estamos haciendo.

Tú y solo tú has atraído este artículo, esta información. Y tú y solo tú eres responsable de lo que puedes hacer con esta información.
Los seres humanos pasamos gran parte de nuestras vidas (sino toda) ciegos a lo que llamamos evolución. Quiénes somos, dónde estamos y a dónde vamos. Y esta ceguera es la única que nos impide disfrutar al 100% de las posibilidades que la Vida nos ofrece.

Parece una blasfemia. Con la premisa del mal, ¿cómo se puede concluir que 
Dios existe? El mal es el escándalo de la razón. ¿Cómo puede estar Dios en el origen 
del mal? Lo cierto es que un gran maestro de teología, Tomás de Aquino, razona 
precisamente así:  si malum est, Deus est, si existe el mal es que Dios existe. 
Obviamente afirmación tan asombrosa ha de tener gato encerrado; ha de haber en 
esa premisa mucho más de lo que a primera vista se alcanza.

Si concluyéramos: «luego el sol es responsable del frío y de la oscuridad», 
habríamos incurrido sin duda en una precipitación infantil. Con un poco más de 
experiencia, advertimos que más bien que «irse el sol», ha sucedido  que la tierra le ha 
vuelto la espalda. Si hay un responsable de la carencia de luz y de calor, éste no es el sol 
sino la tierra

EL RIESGO DE LA LIBETAD 
         Por lo tanto, el misterio del mal reside en la libertad creada, que siendo verdadera y 
buena no  es infinitamente perfecta, puede  equivocar el rumbo, más aún puede querer 
equivocarse; puede elegir entre el bien y el mal; puede ella misma perfeccionarse y puede 
negarse y frustrarse. Pero la tremenda  posibilidad del mal es el reverso de la venturosa 
posibilidad de elegir bien y amar libremente. Dios corre el riesgo de la libertad, 
creándola. Crea una libertad buena, con posibilidad de inclinarse al mal pero con 
capacidad de responder positivamente a la llamada del bien.  

Los atletas y apostadores tienen usualmente rituales supersticiosos, ya sean camisas o comidas de la suerte. Esto los mantiene motivados para ganar. Amuletos son usados en todo el mundo. Creer en la suerte puede tener funciones útiles, dicen los psicólogos. Puede ayudarnos a enfrentar situaciones azarosas, como estar envuelto en un accidente, un robo o un desastre natural, y también a que la gente  se sienta más optimista cuando las circunstancias están fuera de su control.
Algunas personas creen en las influencias de su suerte en situaciones externas, si alguien compra un boleto de lotería en su día de suerte, por ejemplo, cree que tiene más posibilidades de ganar. “Esa creencia es más difícil de jutificar, porque no hay manera de que el día en que compraste el ticket influya en las probabilidades de que ganes”, y agregó “las investigaciones han sugerido que las personas que se creen suertudas en realidad lo son porque están más dispuestos a sacarle ventaja a las oportunidades.”

Aun así, ¿por qué nos da tanto miedo el error? Aquí entramos en un discurso que tiene que ver más con el riesgo. Sentimos mucha aversión al riesgo, cuando el riesgo es muchas veces la felicidad temida. La realidad es neutra, y, al final, el riesgo es una cuestión de percepción. Evidentemente, hay riesgos reales, pero sobre todo los riesgos relacionados con la toma de decisiones (los riesgos empresariales, por ejemplo) son muchas veces cuestión de percepción.
CUESTIÓN DE SUERTE  O NOS FALTA ORDEN  ES NUESTROS  PENSAMIENTOS ?..
Bueno  queridos  lectores la suerte   esta echada, esto  es  solo algo de lo que hemos investigado y concluido ; para  que  sean  ustedes  quienes  determinen  que criterio  aplicar....
Por. Luis  Fernando Carmona.



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